lunes

56ª Personas Buenas, Personas Débiles y Personas Malas.



Antes de pasar al lo que sería mi marcha de la secta destructiva veo conveniente e interesante comentar más temas que el líder nos enseñaba a menudo. 
Este es un blog personal y no lleva a rajatabla una cronología de los hechos, también tiene sus reflexiones y pensamientos que además van surgiendo según mi día a día. 
En estos días he recordado mucho ese tipo de enseñanzas sobre los tipos de personas según su naturaleza moral. 

El líder hábil y astuto era un buen observador y calibrador de la gente, cosa muy necesaria para poder conseguir cosas de los otros.
Por tanto ni todo es un error, ni todo verdadero como deje caer en el capítulo anterior. 
Las personas según él estarían clasificadas en:

Buenas, malas y débiles.

Al principio recuerdo que yo era buena persona, creo recordar que solo tendría que librarme de algunos apegos. Del señor C también dijo que era una buena persona y curiosamente después se transformó en un perverso narcisista, de ahí mi estupefacción cuando nos lo dijo. 
Con el tiempo y sobre todo en los años finales yo pase a persona débil, y al final como era de esperar me convertí también en un perverso narcisista, corrompido por la modernidad y la mujer moderna que siempre se llevaba rasca en todo este asunto. 
Ese juego de subes y bajas era muy típico de allí, y supongo que ocurrirá en cualquier ámbito de manipulación tanto sectaria, de grupo, amistad o pareja.

Desde luego la ecuación persona débil mas mala persona da como resultado mucho sufrimiento. Y en eso estoy de acuerdo con las tesis del líder. Ni que decir tiene que he observado esto fuera de la secta y no es raro encontrarse a una persona perversa rodeada de una caterva de débiles que aliados con ella por apego e interés hacen daño o lo intentan a aquellas personas de naturaleza buena y por tanto, personas con energía, dones, ideales, creativas, luchadoras o empáticas con los demás. 
Terminan por aislarla y por un fenómeno de proyección, hacen que las buenas se conviertan en personas con fama de mal humor, problemáticas o negativas. Todo esto orquestado por la persona manipuladora de turno, que como centro pervertidor va amargando la vida a aquellas personas que considera que tienen algo que ella envidia, pues la envidia es algo muy característico de estos perversos. 

Una persona débil además de no cumplir bien con la vida, termina si está en un entorno malo por hacer el mal también y contribuir a el, y no puedo decir otra cosa que ello es verdad. 
Tengo que reconocer que el líder tenía razón aunque lo más gracioso de esto era que él mismo era un perverso también, lo cual hace de todo este fenómeno algo muy interesante y enrevesado. Y es que si una persona busca el confort mental y la comodidad de pensamiento ni siquiera acepta que estas cosas pasan, termina por reducirlo todo a una sencillez que le permita vivir de forma cómoda, y por lo tanto termina siendo manipulada. 

La persona mala y perversa siempre buscará aliados en su causa, gente débil, pelota, halagadora o sumisa. Estos no sufrirán sus ataques lacerantes pero sin embargo si sufrirán en su continuo mental por callar y omitir aquello que es injusto y por tanto tendrán que recoger en algún momento la siembra del mal al que ellos mismos contribuyen, y recordemos a colación el tema ese del pecado de: pensamiento, palabra y omisión. Este último es ocultado mas a menudo de lo que parece por aquellos que simplemente se contentan con no tener problemas y no enfrentarse  con la causa real de todo este mal. 

Evidentemente esto en la secta ocurría de manera magistral, basta con revelarte para saborear la hiel de ver como todo el entorno te tacha de perverso y notar que encima se sienten a gusto y cómodos. Ni que decir tiene que el líder ante esto reforzará a estas personas que aún lo secundan con sutiles halagos y premios, mientras que el rebelde quedará relegado y demonizado

La labor de demonización es algo que estos perversos realizan a sus problemáticas víctimas de forma casi automática en un fenómeno de proyección, así de esta manera, se liberan de sus propios demonios interiores mediante un vertido de basura psíquica en la verdadera víctima que se ve aislada y atacada, y que de forma inevitable termina enfadándose y quedando así como justo lo que el grupo quieren pensar, o sea, el malo de la película.

También pasa, y es increíble, que la persona rebelde produzca miedo por ese mismo fenómeno de proyección, y no me extrañaría por cosas que he leído y he visto, que sea así, o sea, que puedas ser causa de miedo. No todo va a ser agradable para un perverso que también sufre y tiene problemas. Lo que pasa es que siempre después recurre a la gratificación de sus auto-engaños, a sentirse bueno, especial y sobresaliente, y vuelve por tanto, a su estado infantil y de inconsciencia debido a su alto apego al placer psicólogico de sentirse especial, y en este caso, de manera completa y real.

Para más carga de culpa por si esto fuera ya poco, según el líder, si encima el rebelde de turno se iba con la mujer moderna*, al estar sometido por puro interés a las órdenes de ella, no tenía mas remedio que desarrollar vanidad, o sea, sentirse especial y el número uno en todo y sin fallos. Y esto lo haría por varios motivos:
Uno de ellos es para compensar el estado de sometimiento real, otro es que ella orgullosa y perversa no podía aceptar salir con aburrido hombre gris que muestra su dolor, tristeza, fallos o preocupación. Y tengo que decir que en algunos ejemplos que he visto, a veces pasa, es cierto, pero no es cierto en cuanto al significado ese de mujer moderna (que era un concepto pivote y que a forma de eje del mal servía para aislarnos cada vez más). En la vida pasan cosas parecidas pero no de forma completa en cuanto al grado que él nos mostraba ni en la cantidad y asiduidad. La generalización como papel importante en la reducción de la realidad a unos materiales sencillos de manejar, es algo que tenía este tipo de manera muy habitual. Con esa reducción y simplificación el líder podía construir un mundo a su manera y medida, donde por supuesto, él quedaba en la cúspide de esa pirámide de personas inferiores.

Y es que, aunque hay ejemplos o actitudes parecidas en la vida, realmente con la intensidad y el enredo que se daba en la secta no hay comparación alguna. Él era un buen observador, sobre todo de las parejas, algo que le interesaba mucho para poder dividir y separar, y por supuesto quedarse con las "novias perversas" a las que él, siendo bueno y fuerte, era prácticamente el único que podía ayudarlas. 
Por lo que el lecto/ar comprenderá, eso de hecharse pareja allí dentro era harto difícil, porque siempre serías un interesado, débil y lo que es peor: perverso.

¡Ay de aquellos años en que mi vida era mas sencilla!. Cuanto enredo y cuanta maraña vino después, y todo para nada. Aún así la suma débil mas perverso no quiero tenerla cerca. Que cada palo aguante su vela, y si de verdad una persona quiere meterte en esas dependencias e intereses, es su decisión, después no es la solución echarle la culpa a los demás. El diablo puede engañarte unas cuantas veces, pero hay una línea que si la pasas, se puede decir que tú también tienes la culpa.









*Las "enseñanzas" que daba de la mujer moderna son parte del engaño y son falsas, sobretodo en cuanto a lo que simbolizaban. Como en todo en esta vida, tanto hay mujeres y hombres buenos como mujeres y hombres malos. Él generalizaba para poder manipular y le interesaba mucho demonizar a la mujer.









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