41ª El Templo del Mal, la discoteca.

Es un lugar oscuro, las escaleras te llevan hacia abajo, bajo el subsuelo porque ello simboliza la bajada a los niveles inferiores de las pasiones y pecados, la bajada al infierno.
Allí como una masa informe y obnubilada por la música moderna a todo volumen y sus luces hipnóticas, los modernos bajan a cometer todo tipo de pecados en un aquelarre consentido.
Es el lugar donde se invita a hacer el mal, la poca luz que hay es para ocultarnos en la sombra mientras cometemos actos depravados. Bailando sin dignidad para filtear, para ligar y para mentir con halagos, para perder tu nobleza... El hombre pierde su virilidad ofreciéndose a la mujer moderna en bailes ridículos, ella se endiosa y se baña en la charca pestilente de la soberbia y la lujuria.
Es el lugar donde todo está permitido, todo es consentido, allí puedes dar rienda suelta a tus más bajos instintos. Ellas se "entrega" después a hombres sin moralidad, sin oficio, sin virilidad; indicando que ese es el comportamiento que vale, el que debes seguir si quieres triunfar y tener el trofeo de ella. 
Allí es un lugar donde hay muchos delincuentes y no es raro que se produzcan violaciones en los lavabos. Ha vigilantes por razones de seguridad, porque ellas necesitan sentirse seguras para entrar, porque a fin de cuentas son mujeres y son más débiles. 
Después ella entregará su virginidad a un cualquiera, y sentirá que ya nadie la querrá en la vida. Esa noche incluso tendrá pesadillas con ello pero ya no habrá vuelta atrás. Después de que ella que simboliza la "matriz universal" mediante el misterio de mezclar la sangre del primer acto con la semilla depravada de la mente del hombre moderno, ella y él habrán hecho una magia negra que cambiará todo el ambiente cósmico. Ayudará a crear mal clima, guerras, desastres..., solo volviendo como una monja podrá redimirse después de haber estado con un ridículo y detestable hombre moderno.
Y todo ello pasa después de pasar por el templo del mal que forma parte de lo que se llama integrarse en la modernidad.
El satanismo puro, entra por la puerta hacia el averno que ya nunca saldrás...


Estas enseñanzas se nos dieron y eran tituladas: La discoteca*: el templo del mal.



*por cierto no me gustaba bailar en discotecas antes de conocerle, de hecho no se bailar así.